Software As A Service (SaaS en sus siglas en inglés, o Software como servicio en castellano), es una solución en la nube que nos ofrece la posibilidad de disfrutar de un software como si de una aplicación de escritorio que se tratara, es decir, sin tener que preocuparnos de instalarla, mantenerla, o incluso, preocuparnos qué es lo que ocurre detrás de la misma.
SaaS, (Software As A Service) proporciona y mantiene un software de forma activa para sus usuarios a través de la nube, es decir, a través de unos servidores en los que se aloja y se ejecuta dicha aplicación para dar servicio a través de internet. El proveedor del servicio aloja, mantiene las bases de datos y el código necesario para que funciona la aplicación.
Este modelo, al igual que cualquier otro producto o servicio, tiene una serie de ventajas e inconvenientes que debemos tomar en consideración si nos estamos planteando contratar esta solución.
- Ventajas:
- Se puede acceder a la aplicación desde cualquier lugar y desde cualquier dispositivo, sólo necesitamos una conexión a internet. Este hecho aporta una gran flexibilidad y dinamismo a la organizaciones que utilizan estos servicios ya que sus trabajadores no dependen del dispositivo (pc, tablet o móvil) ni del espacio físico. Además supone un beneficio económico al ahorrarnos muchos gastos técnicos y de infraestructura.
- Si crecemos, nuestro software crece con nosotros, adaptándose a las particularidades de nuestra lógica de negocio en cada momento. Puede ser que requiramos más espacio en el disco o en la base de datos, más potencia de máquina para poder servir más recursos a más usuarios, o poder ejecutar otras herramientas complementarias.
- Supone una importante reducción de costes, tanto en los gastos generales como específicos relacionado con las Tecnologías de la Información, siendo el proveedor del servicio el que mantiene los servidores, infraestructura y el mantenimiento del código, y la empresa sólo debe preocuparse de pagar el coste de suscripción al servicio (que además es fijo, sin sorpresas).
- Desventajas:
- Debemos prestar una especial atención al control y gestión de accesos, ya que nuestra aplicación/servicio estará expuesto en la red. Llevar a una adecuada política de usuarios y accesos no puede ahorrar más de un susto.
- Dependemos de nuestro proveedor del servicio y perdemos cierto control del mismo. En última instancia, si disponemos de un proveedor de confianza con el cual mantenemos una relación de confianza, este inconveniente puede ser meramente residual. El líneas generales, debemos mantener un sano equilibrio entre los recursos propios y los de terceros.
- La seguridad en la red puede llegar a ser un verdadero quebradero de cabeza para los responsables del sistema, ya que la red se ve expuesta a un buen número de amenazas y de "amigos de lo ajeno". Si bien este hecho puede suponer un alto incremento de recursos, en el caso de las pequeñas y medianas empresas, PYMES, poder delegar la seguridad en un proveedor de servicios con mayores recursos para hacer frente a este tipo de amenazas, puede hacer que lo que en un principio se plante como una desventaja se torne en un ventaja competitiva.
Ten en cuenta que las mayor parte de las brechas de seguridad que se producen en sitio y aplicaciones web tienen su origen en una falta de mantenimiento o bien del servidor o bien del software que corre en dicho servidor.
Sistemas de Gestión de Contenidos (CMS o Content Management Systems), ERP / CRM (o Sistemas de Gestión Empresarial) o Cloud Storage (o Sistemas de Almacenamiento y Gestión de Ficheros), son algunos de los servicios más comunes que en la actualidad se suelen encontrar ofertados como servicio.